En la actualidad estoy buscando nuevos proyectos en los que ayudar a través de mis conocimientos en SEM, la cual es mi parte favorita del marketing digital y en la que me gustaría seguir aprendiendo y desarrollando mis habilidades.

Por otro lado he invertido mucho tiempo en formarme con los mejores. He tenido el privilegio de aprender de grandes profesionales como Alan Valdez, SEOS VE, y, sobre todo, de Carlos David López, quien ha sido mi gran mentor en este ámbito y me ha inspirado a seguir creciendo en el mundo del SEM. Estoy muy agradecido a todos ellos por lo aprendido todo este tiempo.

Mi objetivo es utilizar las mejores estrategias de Google Ads para obtener resultados medibles y efectivos. Estoy listo para trabajar en proyectos desafiantes para seguir aprendiendo y mejorando cada día. A continuación os mostraré mis habilidades en el mundo del SEM y como fueron aplicadas en una campaña de Google ADS sobre una clínica de psicología.

Dado que el objetivo era obtener clics más económicos, decidí no aumentar el presupuesto para esta campaña. En lugar de eso, opté por bajar la puja para reducir el CPC medio y lograr más clics con el mismo presupuesto disponible. De esta manera, conseguimos equilibrar el gasto, sin sacrificar la efectividad de la campaña. Es importante destacar que los resultado fueron sorprendentes al ver que mantuvimos el mismo CTR, y una bajada del CPC llegando a dejar nuestro CPC por 1,2.

Por otro lado, en la campaña de psicología infantil, el CPC medio era más bajo, rondando entre 1 euro y 1,1 euros. Sin embargo en esta campaña teníamos una mayor cuota de impresión (75%) mientras que psicología clínica teníamos un porcentaje mucho menor, debido al precio del clic y la elevada competencia.

Pese a esto la campaña de psicología clínica nos seguía derivando conversiones, al igual que ocurría en la campaña de psicología infantil con la diferencia de que en ella conseguíamos clics más baratos y por lo tanto mayor volumen que en la de psicología clínica.

Primero, me aseguré de que los anuncios fueran lo más relevantes posible para las búsquedas de los usuarios.

-Utilicé las palabras clave principales dentro de los títulos y las descripciones para que el anuncio coincidiera exactamente con las búsquedas.
– Creé grupos de anuncios muy específicos, con palabras clave relacionadas directamente con el texto del anuncio, para que la conexión entre la búsqueda y el anuncio fuera clara.
– Personalicé los anuncios para diferentes audiencias, destacando beneficios específicos para cada segmento.

Esto hizo que Google interpretara mis anuncios como altamente relevantes, lo que aumentó el nivel de calidad y redujo el CPC.

El CTR es clave para que Google valore positivamente el anuncio. Para mejorarlo:

-Escribí títulos atractivos y claros, con llamadas a la acción directas como «Reserva tu cita hoy» o «Consulta sin compromiso».
– Añadí números y datos concretos para captar la atención, como «Más de 20 años de experiencia» o «Sesiones desde 40€».
-Usé extensiones de anuncio (como enlaces a sitio, llamadas y textos destacados) para ocupar más espacio en la pantalla y ofrecer más información útil.

No basta con que el anuncio sea bueno; la página de destino también debe cumplir las expectativas del usuario:

-Me aseguré de que la página cargara rápido para evitar abandonos.
-Hice que el contenido de la página fuera coherente con el anuncio, para que el usuario encontrara exactamente lo que prometía el anuncio.
– Optimicé la estructura y el diseño de la página para facilitar la navegación y las conversiones, con botones de llamada a la acción visibles y claros.

Esta mejora hizo que el nivel de calidad subiera aún más, ya que Google también evalúa la experiencia de la página de destino para determinar el CPC.